Sobre mí
"De la pasión a la transformación: cómo el fitness cambió mi vida"
Desde muy joven sentí una fuerte atracción por los físicos trabajados, esos cuerpos que reflejan esfuerzo y disciplina. Pero mi camino no fue fácil.
Pasé de ser un chico con sobrepeso a adelgazar demasiado, sin encontrarme del todo cómodo en mi piel. Me veía mejor, pero no me sentía completo.
A los 15 años pisé por primera vez un gimnasio con una idea clara: quería cambiar mi físico y convertirme en la mejor versión de mí mismo. Lo que comenzó como una búsqueda superficial, pronto se transformó en una auténtica pasión.
El entrenamiento me enganchó, no solo por los cambios físicos, sino por lo que me hacía sentir.
Mientras otros caían en la vida nocturna y las distracciones propias de la universidad, yo tomé una decisión distinta: me alejé de todo lo que no sumaba y me enfoqué en crecer, entrenar, aprender y superarme.
Durante años trabajé en un puesto fijo que me daba estabilidad, pero no propósito.
Fueron 7 años en los que sentía, cada día, que tenía más dentro de mí… que esto no era lo que realmente quería hacer con mi vida. Hasta que un día tomé la decisión: dejé mi trabajo para apostar todo a mi proyecto.
¿Fue fácil? No.
¿Mi entorno lo entendía? Tampoco.
La mayoría no apoyaba la idea de que dejara una seguridad económica por un sueño que aún no estaba consolidado. Pero no escuché a nadie. Tenía claro lo que quería construir.
Inmediatamente después, tomé otra decisión clave: invertí más de 10.000€ en formaciones, mentorías y educación especializada. No quería improvisar. Quería hacer las cosas bien.
Ya tenía experiencia propia, pero necesitaba estructura, fundamentos y profesionalización.
Completé lo que la práctica me había enseñado con conocimientos sólidos que me permiten hoy dar un servicio de alto nivel.
Empecé ayudando a mi círculo más cercano: amigos, conocidos, compañeros que me pedían consejo.
Me gustaba ayudarles, me volcaba en su proceso… y funcionaba. Veían resultados reales. Eso me confirmó que estaba en el camino correcto.
Con el tiempo, el boca a boca hizo lo suyo. Llegaron más personas. Más retos. Más casos de éxito.
Hoy puedo decir con orgullo que acompaño a decenas de personas cada mes a mejorar su físico, su mentalidad y su vida.
Porque esto no va solo de levantar pesas o seguir una dieta. Esto va de compromiso, constancia, decisiones.
Y si tú estás en ese punto donde sabes que necesitas un cambio, pero no sabes cómo empezar… yo estoy aquí para guiarte en el proceso.
